Como dice un proverbio muy conocido, «Si quieres cambiar el mundo, ve a casa y ama a tu familia». Eso no significa que las personas deban ignorar las necesidades fuera de sus hogares, sino que deberían prestar atención a las necesidades que existen en el seno de sus hogares.
Puede ser tentador, cuando nuestra prioridad es el servicio, concentrarnos únicamente en aquello que parece servicio: los proyectos, la planificación o el trabajo que rinde un beneficio visible para aquellos que lo necesitan, pero para hacer una labor eficaz, debemos poner en orden nuestra casa. En Rotary, significa comportarnos de acuerdo con los principios de Rotary, tratando a los demás con respeto y cumpliendo con La Prueba Cuádruple. Significa maximizar nuestro impacto mediante una planificación minuciosa y una prudente custodia de nuestros fondos. Además, significa cuidar la salud a largo plazo de nuestra organización garantizando que nuestra membresía sea sólida, que se involucre y que goce de buena salud.
Nuestra membresía se ha mantenido en alrededor de 1,2 millones por 20 años. No estamos creciendo y nuestros socios son cada vez mayores. Tenemos demasiados clubes que no cuentan con los conocimientos o la motivación para generar un impacto: clubes que no saben lo que hacemos en el mundo, clubes que no conocen nuestros programas ni nuestra Fundación y que ni siquiera saben cómo involucrarse. Como la mayoría de nuestros socios son hombres, claramente no nos estamos esforzando lo suficiente para convertirnos en la organización preferida de las mujeres que desean servir a los demás.
Ante todo, somos una organización de membresía. Si queremos alcanzar las metas que nos hemos fijado, debemos dar prioridad a la membresía. Todos tenemos la responsabilidad de tomar este tema con seriedad, no solo invitando a socios potenciales, sino también asegurándonos de que los nuevos socios sean bienvenidos en clubes que les ofrezcan algo valioso. Si ves que alguien entra a una reunión y se muestra dudoso, asegúrate de que esa persona tenga un lugar donde sentarse y que participe en la conversación. Si te entusiasma un programa de Rotary, cerciórate de que tu club lo conozca y sepa cómo involucrarse. Si detectas una necesidad en la comunidad, habla al respecto en la reunión de la semana. Si queremos ser parte de una organización que sea sólida, activa y que tenga un impacto, comencemos en nuestra casa y seamos la inspiración en Rotary.